Estaba aumentando mi cabreo a medida que leía la enésima tontería del señor Mas sobre sus fobias a España y a todo lo que huela a español, cuando he visto en televisión cómo celebraban cuatro jugadores españoles su gol en Gales, mostrando camisetas con la bandera y el nombre de España. Sin complejos. No sé si todo se limita a una operación de márketing para reflotar la Marca España, más hundida que nunca, o se ha tratado, como así parece, de un gesto casi espontáneo de cuatro chavales que añoran su país. Y que en los momentos de felicidad y alegría se acuerdan de su tierra, donde está su gente. Un ovetense, un castellonense, un gaditano y un tarraconense –escuece, president, no ha sacado senyera– han animado una tarde futbolera del sábado en la que las noticias electorales y económicas no dan tregua. En un momento en el que la imagen de España en el exterior y dentro está por los suelos, que por una vez sea protagonista fuera de nuestras fronteras por este hecho simpático e inhabitual hasta sorprende. No, hoy no somos noticias por el paro, ni por el presunto rescate, ni por las manifestaciones con cargas policiales, ni por la petición de independencia del líder espiritual de un pequeño país de ahí arriba (Guardiola, dixit). Hoy miles de galeses han visto cómo cuatro deportistas muestran con orgullo la bandera de su país en tierra extranjera. Sin complejos. ¿Y por qué iban a tenerlos? (Imagen de www.elmundo.es)
Blog personal y cajón de sastre (y desastre). Opinaré de lo que quiera y como quiera. De viajes realizados y de los pendientes, de mis sueños por cumplir, de agricultura y ganadería, de música y cine, de mis miedos, de literatura, de periodismo y lo mal que pinta, de mis series, de lo que quiero ser de mayor (más), de lo mal que lo paso con las injusticias, de lo harta que estoy de la mala gente, de lo perra que es la vida...
